El descenso en 3 días

DOMINGO
Descreída de todo.
(Qué absoluta!)
Mentira, no de todo.
De esto.
(Encontré un mosquito muerto entre las teclas del teclado. Hace unos días aplaudí un mosquito acá mismo, aparentemente sin éxito. Digo que es el mismo mosquito. Éxito ignorado, ahora auto-reconocido.)
Descreimiento no es lo mismo que Incertidumbre. El primero niega, la segunda ignora.
El primero no implica Confianza de ninguna manera, la segunda podría hacerse amiga.
Esperar no me sirve, pero es lo que por ahora hago, de a ratos.
Y de a ratos, descreo.
De a ratos, confianza. Y son los mejores. Se me relaja el alma, se me escapa una sonrisa de costadito.
Ay, ay, ay…

LUNES
Y de no creer en nada, tal vez eso traiga lo que deba ser. En cuanto ya no tenga nada a que aferrarme, cuando nada me importe.
Tal vez ahí le importe. Tal vez ahí me encuentre.
Ya probé, estoy cansada. Ahora estoy cansada.
“No te vayas”. Mi conciencia sabía, pero mi inconciencia sabía más. Sabía lo que mi niña gritaba. “Quedate.”
Qué vergüenza, qué tristeza.

MARTES
Ya no creo. Casi, casi que no creo.
Fondo?
Será… No es como el otro. No es tan húmedo. Es seco, frío. Es solo. Corre un poco de aire, y no está del todo oscuro. Qué raro. Será otro fondo. Probablemente, posiblemente, sí, es otro fondo. Qué bueno.
(Y qué empeño este de buscarle lo bueno a lo…)
Otro fondo. De este salgo sola. En un momento me voy a encontrar afuera y seguramente no me haya dado cuenta de que estaba saliendo. Esto lo sé por experiencia, aunque puedo sorprenderme. Estoy abierta a las sorpresas. Qué la vida (mi vida, yo misma) me siga asombrando.
El “ciclismo” de la vida… Por cíclica, o porque me bicicletéa. Pongo alguna ficha, si aún me queda, a la primera opción.

El puma y la tormenta

Un día de estos me voy a desintegrar

Un día de estos me voy a desintegrar.

Claro, seguramente.

Un día de estos

Iré, volveré, seré.

Cuando sea lo que he de ser

Dejare este, y seré

Lo que siempre había sido

(lo que era, estaré siendo y habré de ser).

Todo en uno

3 en 1

Siempre 3. Más que dualidad, trinidad.

En cada uno trinidad, en cada uno unidad.

En todo unidad.

“No se puede amar lo que no se conoce”.

Prefiero: “Se ama lo que se conoce”.

Ahora lo sé, mentalmente, en mi lógica.

Pero no lo conozco, aun no.

Llegará.

Sentiré, conoceré y amaré.

Amar es Ser.

El Amor es lo que Es.

La fuerza, la materia de Todo Lo Que Es.

Un desliz que te deja ver cómo funciona ese sistema

Recordar que todo lo bueno que recibimos es porque en algún momento lo pedimos, aunque nos hayamos olvidado por completo. Tal vez fue hace mucho tiempo, tal vez lo pensamos al pasar y no le dimos importancia y como ahora es tan bueno e importante, no lo relacionamos con ese otro pensamiento. O tal vez solo se archivó. 

(Seguramente, además de pensarlo, lo sentimos. Me animó a sugerir que en el sentimiento positivo, en la armonía de la vibración interna está la verdadera clave.)


Lo bueno de recordarlo es que es una señal. Un desliz de la matrix que te deja ver cómo funciona ese sistema, el azar o destino o el “que sea lo que sea” o como cada uno lo llame. 

Hay un sistema, hay leyes universales en todos lados. Probablemente las que no entendemos formen el “azar”. O será lo que le llaman “incertidumbre”? 

A ver… Una siente algo, lo “formula”, y ya está. Ahí debe soltarse el pensamiento. “Si lo amas déjalo libre. Si vuelve a ti es tuyo, sino, nunca lo fue”. Y cuando vuelve materializado, puede suceder que no lo identifiquemos como generado por nosotros mismos desde este nivel más básico (de base), fundamental, inherente a uno mismo. 

Entonces cuando te percatás de esto decís “Ahhh…” y un suspiro reverencial. 

Ahora a practicar y practicar. 


Como dice Joseph Campbell, cambiar esta programación occidental adquirida basada en el deseo y el miedo. El deseo, el querer, sentir necesidad, falta, anhelar. Y el miedo, el temor, la no confianza, inseguridad. 

El otro día leí algo sobre el sentirse inseguro en una publicación de Ale en FB, creo que de Osho. Hablaba de aceptar el vivir en la inseguridad porque así es, nunca estamos seguros del todo. 

Y también me acordé de un video de Chopra que me recomendó Lola, el tipo tiraba una re clave: aceptar la Incertidumbre, porque es ahí donde todo nace. 

Todos apuntan a lo mismo. Yo también lo siento así. 

Lo único que hay que hacer es sentirlo. Querer no es necesario, esperar tampoco. 

Si realmente es, acá está. Acá y ahora. 

(Esto, aprendiendo a vivir el “aquí y ahora”, que cada momento es lo que justamente necesitamos.)

Vínculos


Y pensaba en lo que son para mí. Desde mi, con la humildad que eso realmente significa.
Cómo lo que quise, lo tuve, aunque al principio pensaba que no.

Sentí que el que quería y necesitaba experimentar era el ser madre. Ahí noté la importancia del otro vínculo: la pareja. Y pensé también en llegar a conexiones más altas con esa persona, que esa será la persona para combinar energías y vivenciar este pedazo de existencia ampliado, expandido por hacerse uno con el otro.
Sentir un poco eso de ser "todo". Todos partes del todo, con conciencia de uno mismo (si lográs comprenderlo). Dos conciencias juntas. 
Y hasta ahí llegás? No. Por qué eso solo con "otro" y no con "otros"?
Primero, no con todos tendría hijos.  Segundo, este tema es para otro análisis.

Una hija. Por qué ansío tanto esta relación? 
Es lo que más me fascina. Me pregunté y entonces SENTÍ el porqué.
Me imaginé sintiendo con ella. Y saber que en algún momento nuestros cuerpos estarán unidos, serán realmente uno... Esa densidad de la conexión de dos personas es maravillosa!
Todos la hemos vivido al menos una vez en la vida, al ser gestados. Nos estábamos densificando desde el material denso de otros, padre y madre. Es con la madre donde se unen los dos cuerpos-conciencias: el de la madre y el del hijo.
Cuando una mujer queda embarazada se cumple el ciclo y el regalo es volver a estar conectados desde lo más denso a lo más sutil.
Hermoso.

En esto estaba cuando noté que debajo del salto de cama de mi mamá, tenía puesta una musculosa que me dio Marina ayer. Marina, amiga muy querida, una de las mejores personas que disfruté en mi vida y madre primeriza hace casi un año...
Y dí las gracias.